Reza el dicho, que es más probable que salgas airoso de las fauces de un león, que del despecho de una mujer…!
A estas alturas de la semana ya se ha hablado mucho sobre el comunicado del expresidente Jordi Pujol i Soley. Y realmente uno se sorprende del seísmo que ha provocado tal declaración. Ha sido como soltar al zorro para que los perros de caza salgan al encuentro a ver si pueden hincar los colmillos en la yugular de la presa. Puedo esperar que la fauna española haya ido a degüello sobre él. E igualmente desde aquí con personajes de la talla de Alicia Sánchez Camacho, Albert Rivera y demás consumidores de carnaza de la mano del amo pro-unionista español. Títeres de la autocomplacencia que solo se sienten bien cuando despotrican una y otra vez, volando en circulos a la espera, sobre lo que dañe el proceso soberanista. Pero me ha costado asimilar porqué los partidos pro 9N se han echado las manos a la cabeza y se han puesto a clamar justicia divina sobre la famosa herencia del expresidente de una manera similar. Ni el poder judicial del estado, ni la hacienda pública, ni el ministerio de económica español, ni nadie relevante del ejecutivo, han dado muestras de ese nerviosismo que si he presenciado en Catalunya (aquí lo queremos arreglar todo, sentimos más vergüenza que nadie. Allí no sé si conocen esa palabra). En Madrid están más acostumbrados a que poseer cuentas en el extranjero sea algo mal visto, al contrario. Otra cosa es que se declaren. Y no hablo de la Familia Real, no hablo de la tropa de PP, no hablo de ese 80 % de las empresas del IBEX 35 que tienen la constitución de sus empresas en paraísos fiscales, etc. Hablo de que un empresario de prestigio que se preciara en este país (más que en cualquier otro de la vieja Europa), tenía que tener una cuenta en Andorra, Suiza, o mar allende. Era signo de éxito, y de confiar más en los de fuera que en los de aquí. Algo normal por cierto. En las últimas amnistías fiscales la regularización tributaria logró apenas un 8% de la recaudación prevista para el retorno del dinero. Espero que no sea tanto la indignación de la “evasión fiscal” llevada a cabo por esa familia cuando tenemos la “elusión fiscal” de las Sicavs legalmente establecidas, sino de donde salió el dinero. Que también lo intuimos.
El expresident Pujol, ha sido un político con muchos claroscuros, en algunos momentos jactancioso y hasta endiosado, alguien al que se le concedió un gran beneplacito político, que no ciudadano, por su catalanismo y que acabó haciendo de Catalunya su cortijo. Eso es lo que tiene la política con mayoria, y sin ella. Pero Pujol no ha sido peor gobernante que José María Aznar, que nos llevo a la ilegal guerra de Irak y dudo que nadie le quite los privilegios de expresidente por ello. Por no hablar de Felipe González y sus correrías. El último escándalo de los ERES en Andalucía es parte de su herencia socialista. Y puedo seguir con una extensísima lista de políticos. Se da por hecho que la investigación sobre el acopio de dinero en paraisos fiscales de la familia Pujol irá ‘in crescendo’, ahora bien según como se gestione, Catalunya tiene más de perder que de ganar, y habría que ser prudente con lo que vaya aflorando. Se habla sin parar de corrupción politica en los medios, y de hacer comparecer al expresident en el parlament, pero aún espero a la Sra Camacho que lo haga por el caso de las escuchas en la Camarga. (Por cierto, se representará una obra de teatro sobre el Camargagate en el 2015 alentada por el Sr Joan Puig). El escarnio antes de una resolución o información, juridica o periodistica, sobre el caso no es algo del talante de esta tierra. ¿O sí? No solo es lavar la imagen de las siglas de un partido, sino la de una persona que ha tenido el valor de declarar algo así (veremos si es una excusa preparada, o si está haciendo de cabeza de turco como padre por sus hijos). Mientras no se debe dar carnaza a los que vuelan en circulo. Cómo es posible que a la examante de Pujol junior, María Victoria Álvarez [mejor sin enlace] se le dé tanto protagonismo en los medios, por mucha razón e información que disponga. Se dice que no hay nada peor que una 'ex' despechada, pero lo que está haciendo esta ciudadana exponiendo día sí, día también, la situación como si fuera de la 'Oficina del Fiscal' no me parece ético, pues ahora no puede ser más que una marioneta rota con sed de venganza, y en manos de intereses partidistas. Puedo entender que la honestidad y la moralidad que tanto proclamaba el Sr. Pujol a muchos les hayan fallado, pero en los momentos históricos por los que pasa Catalunya no son los más adecuados para ir más allá de donde se ha ido por querer saciarse de más sangre. Y sobre el despecho ya se sabe: “El amor cuando no muere mata, y los amores que matan nunca mueren…”
J L Herrera Vega
Ciències de la Informació i de la Comunicació
El Comunicado
