Semana significativa. El pasado lunes fue investido en el Parlament a Quim Torra de JxCat, como 131 President de la Generalitat. Con los 66 apoyos de JxCat y de ERC, las 4 abstenciones de la CUP, y los 65 votos en contra de Cs, PSC, comuns y PP, se da paso a la línea continuista de seguir por el camino de la independencia hacia la república plena.
Ya en su primer discurso ante el Parlament tras ser elegido, prometió que tabajará por la República de Catalunya, para que el expresident Carles Puigdemont sea investido de nuevo al considerarle el legítimo president de Catalunya, concluyendo con un: “Visca Catalunya lliure”.
Esta franqueza en su discurso de investidura ha servido para que la caverna más cavernaria y profunda, la que prefiere no dialogar sino es para imponer el miedo, salga a la palestra desde todos los frentes con avisos velados de lo que va a pasar o con amenazas directamente. Al más puro Estado del miedo y las amenazas dentro de la ‘legalidad’.
Alguien dijo que el miedo mueve la Historia. Y en eso estamos, avanzando a su lado, con amenazas constantes, al compás de la certeza que temer es una forma de asumir que se está haciendo algo, que se ha perdido la defensa a costa de avanzar. Contra algunos miedos se inventó, por ejemplo, la Democracia. Esa que impera aquí, que se oculta tras el Estado y solo es visible si uno se lo cree.
El Gobierno y el PSOE han blindado y renovado su alianza amenazadora contra Cataluña. Coincidencia plena en el ideario de sus hojas de ruta. Sin retraimientos ni fisuras. Ambos califican el discurso “frentista” y “xenófobo” del nuevo president electo, Quim Torra, y prometen una “respuesta pactada y proporcional en la defensa de la legalidad constitucional y estatutaria frente a cualquier eventual desafío” de los separatistas.
Que Catalunya vaya a tener nuevo Govern no les hace ilusión, les molesta para continuar con este modelo de estado autoritario. Por eso coinciden en rechazar, según sus palabras, “Todo intento de poner en marcha estructuras políticas distintas a las únicas válidas, que son aquellas contempladas en la Constitución y el Estatuto de autonomía”. Según Sanchez, “No hay dos legitimidades”. Rajoy añade desde Sofia “En Cataluña solo puede haber un presidente, una sola legalidad”. No tardaran en amenazar a Torra en poco tiempo.
Albert Rivera líder del partido de ultraderecha Cs, pidió al presidente del Gobierno Mariano Rajoy en la Moncloa, que mantenga la aplicación del artículo 155 en Cataluña y que lo amplíe a finanzas, Mossos y medios de comunicación públicos, aunque el Gobierno por esta vez, precisa que solo actuará cuando haya ‘hechos’ que lo justifiquen.
Según fuentes jurídicas, para poner de nuevo en marcha la aplicación del artículo 155 de la Constitución solo hacen falta dos reuniones del Consejo de Ministros. La primera, para hacer efectivo el requerimiento al presidente de la Generalitat y la segunda para trasladar al Senado las medidas propuestas. Así de fácil.
Estaremos atentos a lo que el portavoz del Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo, ha señalado como la intención del Ejecutivo de abrir una nueva etapa con la Generalitat, basada en el diálogo “dentro de la ley”. Muy, muy difícil lo van a tener ahora acostumbrados a fomentar el miedo para entablar un dialogo, con el precio tan alto que ha pagado Catalunya y a Europa dirigiendose 'hacia la luz'…
JL Herrera Vega
Ciéncies de la Informació i la Comunicació
El Comunicado
